"Desde el comienzo de los tiempos, los seres humanos y los animales, de manera instintiva, han empleado el tacto para confortar, apoyar, conectar, rejuvenecer y sanar; no tiene ni cien ni cinco mil años, sino que es tan antiguo como el planeta mismo.
Ya cuando empezamos como bebés, los humanos extraemos la energía de los que nos rodean al alzarnos, sostenernos, arrullarnos y alimentarnos. Se dice que los bebés prematuros recobran el peso más rápidamente si son tocados y alzados. A medida que los humanos vamos creciendo, el poder del tacto se torna integral para el propio bienestar, y en la vida cotidiana sigue expresando la intención de una manera energética. Al tocarse, el ser humano transfiere energía de una persona a otra, como la palmada aliviadora en el hombro, la mirada compasiva, los brazos abiertos en son de bienvenida, o el beso sanador sobre la lastimadura en el dedo de un niño".
...Se cree que Mikao Usui ha enseñado a sus alumnos a colocar sus manos sobre el cuerpo o cerca de él, para palmearlo, acariciarlo, observarlo y tocarlo, con la intención de que el cuerpo pueda recuperar su equilibrio.
Es probable que Mikao Usui no haya recurrido nunca a este conjunto de imposición de manos como lo usamos hoy día, sino más bien que tan solo haya realizado armonizaciones: lo hacía permaneciendo cerca del receptor o tocándolo. Para él, la capacidad de convertirse en uno con la energía de los demás era su forma de sanar. [En el Hikkei afirma literalmente: "Ki y Luz son emanados del cuerpo del sanador, especialmente de los ojos, boca y manos". Las manos son citadas en último lugar.]
Las posiciones de manos las fue creando tiempo después, de la misma manera que los símbolos y mantras, como instrumentos de entrenamiento para aquellos que no lograban alcanzar la destreza energética de Usui. Cuando se experimentaba cierta dificultad para intuir dónde había que ubicar las manos sobre el cuerpo, se enseñaban estas posiciones como una herramienta que facilitaba la tarea.
...Aparentemente, él enseñó cinco posiciones en los años veinte, que se centraban sólo en la cabeza, pero el resto del tratamiento en las otras partes del cuerpo - si es que se trataban - se hacía por intuición"
"Enciclopedia de Reiki",
de Bronwen y Frans Stiene.
Ed. Uriel-Satori.
de Bronwen y Frans Stiene.
Ed. Uriel-Satori.