sábado, 6 de febrero de 2016

Biografía del silencicio.

"Despertar es descubrir que estamos en una cárcel. Pero despertar es también descubrir que esa cárcel no tiene barrotes y que, en rigor, no es propiamente una cárcel. ¿Por qué he vivido encerrado en una cárcel que no es tal?, comenzamos entonces a preguntarnos. Y vamos a la puerta. Y salimos. Hacer meditación es ese momento en el que salimos. Es descubrir que la puerta no ha estado nunca cerrada, que eres tú quien la hace cerrado con doble vuelta de llave. esa puerta no es  tal. Te la has inventado. "La puerta sin puerta" es una expresión típicamente zen que me hace pensar en que buenamente de lo que vivimos es puramente ilusorio.

De modo que deja ya de mirar esa puerta que has cerrado, levántate y ábrela. Mejor aún: levántate y date cuenta de que ahí nunca ha habido puerta alguna.

Conviene estudiar muy despacio el material del que están hechos los barrotes con los que construimos nuestras cárceles. Y hay que estudiar también el proceso por el que se construyen esos barrotes. Es así, por medio de este estudio, como se posibilita ese chispazo o intuición gracias a la que uno se libera. Para vivir en la realidad, debemos demoler los sueños que nos han encarcelado. nuestros sueños no son por lo general verdaderamente nuestros: los tomamos prestados, los fabricamos con un material poco fiable. Investiguemos o no en nuestras vidas, casi todos los sueños terminarán por desmoronarse precisamente porque no son nuestros."

Biografía del silencio.
Ed. Siruela, 11ª ed., 2015