miércoles, 10 de noviembre de 2010

Las actitudes de la mediatción Zen.

Según Dokusho Villalba, hay cuatro actitudes que se deben practicar en el acto de la meditación Zen:

Actitud corporal. La posición corporal debe combinar dos aspectos: estabilidad y vigilia. La postura de zazen en loto o en semiloto es la que obtiene el mejor resultado. En cualquier caso, es fundamental que la postura te permita permanecer inmóvil y atento el mayor tiempo posible. A esto se le llama estabilidad.

Actitud emocional. No te apegues ni rechaces emocionalmente ningún contenido de los que aparecen en tu campo de conciencia. Acepta cada sensación, emoción o pensamiento tal y como es, sin elegir ni rechazar. Si aparece en ti el apego o el rechazo, toma conciencia de que el apego o el rechazo ha surgido en ti y déjalos estar sin darles importancia. A esto se le llama ecuanimidad.


Actitud mental. No tomes partido ni por ni contra nada, sea lo que sea. No juzgues tus propios sentimientos, sensaciones o pensamientos. No digas: "Esto está bien, esto está mal". Si aparecen juicios y valoraciones en tu mente, toma conciencia de los juicios y valoraciones que han surgido y déjalos estar sin darles importancia. A esto se le llama objetividad.


Actitud espiritual. No huyas ni persigas nada, sea lo que sea. No quieras alcanzar nada ni liberarte de nada, sea lo que sea. Simplemente quédate ahí, observando, aceptando que cada cosa es lo que es en este momento. A esto se le llama apertura interior.


Dokusho Villalba
"El océano interior. Guía para la meditación zen"